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Miami (Cristianos.Com) Las novelas de ficción que mezclan historia bíblica y medias verdades con el fin de sembrar duda sobre la veracidad de la Biblia, siguen abriéndose paso con un nuevo estilo contemporáneo muy taquillero. Este es el caso de El apóstol número 13, la nueva novela de Michel Benoit que ya se ha convertido en uno de los libros de mayor venta en Francia.

«El apóstol número 13 podría ser un Código da Vinci, pero sin mentiras, inteligente y verdadero, porque lo que explica existe. Todo ‘thriller’ debe seguir la historia real hasta cierto punto», expresó el propio Benoit en una entrevista concedida a EFE.

Benoit, que fue monje benedictino durante veinte años, en su libro cuestiona los evangelios y desvela la existencia de un apóstol que fue silenciado en los textos sagrados y sostiene que la Iglesia es actualmente ‘una gran estructura vacía’ y el cristianismo un castillo de naipes que cae si se toca una sola de sus piezas.

«El cristianismo no desaparecerá en un futuro inmediato pero sobrevivirá como un moribundo. Estamos en el final de ciclo de una civilización y yo no veré quién tomará el puesto al cristianismo, pero creo que ocurrirá como con los grandes imperios de Egipto o Roma, que desaparecieron’, pronosticó el autor.

Aradí Vega-Rivera conversó con el Dr. Samuel Pagán, reconocido biblista y Decano académico del Centro de estudios teológicos de Florida Miami y Orlando para que reaccionara a las declaraciones de Benoit. A continuación incluimos su respuesta:

La aparición de la novela del Benoit, es un gran desafío a la inteligencia y una lectura equivocada de las realidades socio-religiosas de gran parte de las iglesias del mundo. Las reflexiones de Benoit se fundamentan en sus experiencias religiosas en Francia y Europa, donde algunos sectores del cristianismo vive un ambiente de letargo, uno de sus momentos más desafiantes de la historia.

En torno a ese escrito es importante indicar que es del género de la novela, y que como toda buena novela, hace un uso de la ficción en el desarrollo de su trama. Y, aunque el autor indica que tiene algunos fundamentos históricos, la verdad es que la lectura crítica del libro revela serios distanciamientos con la experiencia religiosa de otras latitudes, específicamente América Latina.

Como en la obra de Brown, El CódigoDa Vinci, Benoit cuestiona la veracidad histórica de las narraciones evangélicas. Ese estilo literario de desafiar la autoridad y veracidad de las Sagradas Escrituras es parte de las formas contemporáneas y los estilos que desean alcanzar el éxito de taquilla o convertir la obra en un Best seller. Añade al autor, que la iglesia es una estructura vacía y que el cristianismo está al borde del precipicio histórico, pues es como un gran castillo de naipes, próximo a derribarse.

Ante tales afirmaciones de la novela, debemos presentar la realidad religiosa latinoamericana, que se ha convertido en un centro extraordinario para el desarrollo y el crecimiento de la fe. Esa experiencia de despertar religioso también se experimenta en el Asia y el áfrica, en donde millones y millones de creyentes diariamente profesan su fe de las formas más extraordinarias y peculiares, de acuerdo con sus vivencias espirituales y en relación con sus raíces culturales.

Ante la ficción literaria de Benoit, presentamos la realidad histórica de las iglesias latinoamericanas. Esas congregaciones, en vez de manifestar agotamiento social y desorientación espiritual, por el contrario, revelan dinamismo teológico, ponen de relieve el entusiasmo litúrgico, y subrayan el espíritu de servicio y generosidad que se vivía en las primeras comunidades cristianas, de acuerdo con los relatos del Nuevo Testamento.

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