Argentina

Vecinos de Limón, molestos por actividades de una iglesia evangélica, hicieron una presentación ante la justicia, que determinó que se ponga horario y nivel de volumen en los cultos y reuniones, así como una estricta vigilancia del municipio.

El Alto Tribunal Constitucional, a través de un documento de la Sala IV, expresa que «se dictamine técnicamente el nivel y horario del ruido producido por la Iglesia Evangélica de Paraíso, Bananito, Limón y, de justificarse, emita en forma inmediata posterior al dictamen las órdenes sanitarias correspondientes».
 
«Asimismo, se ordena notificar esta sentencia a la Ministra de Salud, con el fin de que vele por su correcto cumplimiento, y al Alcalde Municipal de Limón, con el propósito de recordarle su deber de vigilar el cumplimiento del horario máximo de las 20:00 horas impuesto al centro religioso objeto del amparo», añade el texto.

La mujer que interpuso el amparo alegó que «los cultos religiosos inician desde tempranas horas de la noche y concluyen a altas horas, aunado a los gritos, llantos, cantos y música a gran volumen que impiden el descanso».

Limón es una provincia de Costa Rica, ubicada en el extremo oriental del país.

Otros casos
El Departamento Administrativo de Medio Ambiente de Barranquilla (Damab), Colombia, informó que en lo que va de este año ha recibido unas 150 quejas de distintos sectores por llos ruidos generados en los cultos vecinos. La entidad dijo que esta es una de las más de 45 iglesias a las que se les está haciendo seguimiento.

Los líderes de las comunidades a las que se les está haciendo seguimiento, se han defendido ante los medios esgrimiendo la libertad de cultos existente en el país, amparada por la Ley 133 de 1994. Argumentan que los ataques contra las iglesias son generados por quienes se molestan con esa libertad.

Cuando en Nicaragua se dio este debate hace un tiempo, varios pastores preguntaban porqué solo se acusaba a las comunidades  evangélicas en general, cuando también la Iglesia Católica genera estruendos y jornadas de procesiones, fiestas patronales y romerías.

Un brasileño, paulista, se cansó hace un tiempo de los ruidos que generaba una iglesia vecina y creó un sitio web titulado: Dios no es sordo. Este sitio, visitado por miles de personas que dicen sufrir por la música y el alto volumen de los servicios religiosos, reza en su portada: «Es preciso que los representantes de una Iglesia tengan el principio básico del respeto al prójimo para practicar sus actividades. Infelizmente eso no acontece con gran parte de los representantes de las Iglesias Evangélicas. Ellas no tienen lo básico. No practican lo que predican y con eso no respetan y denigran hasta la propia doctrina que dicen seguir…»

Fabiana, una lectora que escribió su queja en el sitio web paulista, afirma: «El barullo que esa iglesia hace es increible. Sé de memoria todos los días de culto y el ensayo. Cuando reclamo me miran con desdén o me dicen que estoy loca o «endemoniada». Un día, un pastor dijo que tienen el derecho a la libertad de Culto, que es un derecho constitucional. Lamentablemente, él distorsiona la ley para justificar su falta de ciudadanía».

Fuentes: InformaTico y Agencias

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