Argentina

Los obispos de Bolivia condenaron ayer la espiral de violencia desatada en las regiones del país que se ha cobrado hasta el momento diez vidas, y respaldaron la propuesta de diálogo realizada por el mandatario boliviano, Evo Morales, y aceptada por el prefecto del departamento de Tarija, Mario Cossío, en nombre del Consejo Nacional Democrático (Conalde).

«Una inmensa mayoría dice sí a la vida, rechaza el recurso de la violencia y confía en que las soluciones a los problemas se encuentren de forma pacífica y en base a acuerdos», reza el comunicado emitido desde Cochabamba, donde los obispos estuvieron reunidos durante dos días.

«No es tarde para que todos, particularmente los que detentan autoridad, funciones de liderazgo y decisión, actúen con racionalidad y sensatez. Es urgente, en el actuar político, social y en los ámbitos de la convivencia civil restablecer el Estado de derecho, promover la cultura de la legalidad y potenciar el aparato estatal democrático al servicio del bien común», añaden.

La Agencia Boliviana de Información informó de que los católicos consideran que sólo un diálogo sincero puede poner fin a los niveles de confrontación, impulsados por actitudes de intolerancia, odio, xenofobia y racismo, tratando de imponer su visión de país.

La Iglesia condenó «la agresión física o verbal, la toma y destrozo de instituciones públicas y privadas, el bloqueo y la instrumentación de grupos y movimientos sociales».

«NO A LA VIOLENCIA, Sí AL ENTENDIMIENTO»

El mensaje de los obispos, también hace referencia al proceso autonómico. Manifiestan que pueden permitir servicios más eficientes y una mayor participación sobre la gestión pública, con una adecuada fiscalización de la ciudadanía. La nueva Constitución Política del Estado debe atender esta problemática. «No a la violencia, sí al entendimiento», agregaron.

También indica que el país vive en un proceso de cambios necesarios para los bolivianos, que debe concretarse con la inclusión de los sectores hasta ahora marginados, pero dichas transformaciones deben ser consensuadas.

Además, hacen un llamamiento a los medios de comunicación para evitar recurrir al sensacionalismo «para no ser cómplices de fatales desenlaces», y convocaron a los creyentes a participar en la jornada de oración, prevista para el viernes 19, «con el fin de que el Señor guíe al país por los caminos de la reconciliación, el bien común y la libertad».

Fuente: EUROPA PRESS

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